El concepto es simple: La visita debe ser un momento placentero y agradable. Preferimos que en la primera consulta los niños se amiguen con el espacio y los modos
de cuidar su salud bucal.
Juntos aprendemos como cepillar los dientes (técnica de cepillado, tipo de pastas dentales,
posición del cepillo, como hacer si el niño no se deja cepillar, etc.); hábitos de dietas
saludables; uso del flúor; ya que lo más importante es la adaptación y el conocimiento
del ambiente y del profesional.
En la 2ª consulta cuando el niño ya conoce el sillón odontológico, el instrumental, los ruidos
y movimientos etc., vamos a realizar los primeros procedimientos como el examen clínico
y si fuera posible, la primera aplicación de flúor.